Innovación y tecnología para superar retos globales en el sector agroalimentario
06/06/2022
La Fundación INTEC presenta el informe 'Agrifood 2022' para analizar las tendencias que se van a dar en el sector primario, industrias de transformación, minoristas, logística, restauración y consumo.
Para que el sector agroalimentario supere esta nueva era tras la pandemia y la guerra es necesario seguir impulsando la tecnología y la innovación, así lo dejaron ayer de manifiesto durante la presentación del informe de la Fundación Europea para la Innovación, INTEC, en colaboración con AgroBank, 'Agrifood 2022'. Este informe forma parte de una investigación que analiza las últimas tendencias y proyecciones más importantes que se van a suceder en la evolución del sector primario, en las industrias de transformación, en el sector de venta minorista y logística, en restauración y hasta en las preferencias y patrones de las conductas del consumidor.
En el acto de presentación, que tuvo lugar en la sede de Tecnova, participaron el presidente de la Diputación de Almería, Javier A. García; la consejera de Agricultura, Carmen Crespo; el presidente de Tecnova, José Luis Estrella; el director territorial para Andalucía Oriental de CaixaBank, Juan Ignacio Zafra; y el vicepresidente ejecutivo de INTEC, Juan Francisco Delgado, que expuso el resultado y conclusiones del informe.
«La innovación y la tecnología, como se ve en el informe, es una buena solución para avanzar y superar estos retos para el mundo y para España», indicaron. El estudio pone en valor el aumento de la inversión en innovación y 'startups' entre un 15% y un 30% durante este año.
En cuanto al incremento de los precios de fertilizantes y de la energía se deduce que la inversión en I+D orientada a nuevas alternativas de optimización de la producción es crucial con el uso de otras soluciones de edición genética de especies más resistentes a la sequía y enfermedades. Por ello, en el ámbito energético, la tecnología de generación eléctrica está avanzando de forma acelerada, en renovables como la eólica o la solar fotovoltaica, especialmente en los sistemas de riego y en la industria de transformación.
«También los vehículos eléctricos en la agricultura y ganadería y en el transporte son una solución trascendental. Los camiones serán eléctricos, y autónomos en el futuro y esta crisis acelerará estas soluciones para el uso de la movilidad eléctrica», indica el estudio. Respecto al cambio climático, las inversiones tecnológicas, como son el riego inteligente o la previsión precisa del control climático y la prevención de cosechas, serán una prioridad, junto con las políticas relacionadas con el control de los gases de efecto invernadero por parte de la agricultura, con la aparición de alternativas a las granjas.
«Los datos apuntan a que es absolutamente necesario un nuevo modelo en la gestión del agua, con una mejor gobernanza y transparencia en la misma con la ayuda la sensorización, el Internet de las Cosas (IoT) y el 'bigdata'. Ya hay tecnología que ayudaría a ello y que harían de forma sencilla una mayor transparencia y buena gestión», señalaron.
Además, el estudio alude al relevo generacional ya que «España cuenta con una proporción de jóvenes agricultores y agricultoras que se sitúa dentro de las más bajas de toda la Unión Europea». Motivos más que suficientes para desarrollar las recomendaciones de los organismos internacionales y de la propia Política Agraria Común para llevarlas a cabo.
Apoyo de Diputación y Junta de Andalucía
El presidente de Diputación, Javier Aureliano García felicitó a los responsables del estudio y resumió algunas de las claves del liderazgo del campo almeriense que, como enumeró, se sustenta en la creación de los invernaderos, el riego por goteo, el control biológico y la revolución digital. Además, aboga por la unión del sector para una quinta revolución, la de la marca, «para que sean los consumidores los que exijan los productos de Almería. Diputación siempre estará a vuestro lado para que la provincia siga siendo líder en la fabricación de la tecnología que cultiva la salud que, desde Almería, llega a todos los mercados del mundo».
La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, subrayó la colaboración público-privada como un elemento capital para continuar avanzando en innovación y «seguir siendo una gran potencia agroalimentaria» referente en todo el mundo. Como ejemplo de esta «fructífera alianza», la consejera señaló al Polo de Innovación Tecnológica de la Agricultura Andaluza, que permitirá concentrar todo el potencial innovador e investigador de la agroindustria andaluza y convertirse en foco de atracción de nuevos proyectos.
Entre otras cuestiones, la consejera de Agricultura apuntó que el sector andaluz está avanzando hacia una mejora de la comercialización basada en el uso de las nuevas tecnologías y la digitalización. A modo de ejemplo, se ha referido a la posibilidad de contar con una plataforma de comercialización que implementará inteligencia artificial para «establecer un modelo predictivo que permita generar algoritmos para conocer mejor el comportamiento de los mercados y las medidas que se pueden llevar a cabo para influir en ellos».
Además, Crespo incidió en las posibilidades que ofrecerá la Plataforma de Comercialización. Ligada al Polo de Innovación, esta herramienta será muy útil a la hora de la planificación de los cultivos. «Exportamos productos de calidad, pero también innovación porque en Andalucía, y especialmente en Almería, somos punteros en agroalimentación», enfatizó.
El presidente de Tecnova, José Luis Estrella, explicó el trabajo que el centro tecnológico de ámbito internacional innova para aportar valor al sector de las frutas y hortalizas, hasta la tecnología postcosecha. «Queremos innovar en la tecnología que va desde la semilla hasta que llega al consumidor», afirmó.
Por su parte, el director territorial de CaixaBank, Juan Ignacio Zafra, destacó la importancia de conocer todos los datos sobre las tendencias de la agroalimentación para establecer estrategias que consoliden la posición del campo almeriense a nivel internacional y, del mismo modo, asumir los retos actuales como la crisis de precios, entre muchos otros.
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